En una era en la que la sostenibilidad es una necesidad, la inteligencia artificial (IA) se está convirtiendo en una herramienta clave para dar forma a estrategias de sostenibilidad en diversos sectores. Desempe?a un papel polifacético, desde la reducción de la huella de carbono hasta la mejora de la seguridad pública.
Una encuesta realizada en 2022 por McKinsey & Company muestra una tendencia: las organizaciones utilizan cada vez más la IA en su estrategia de sostenibilidad. La encuesta ofrece una visión detallada del uso global de la IA para la sostenibilidad, con una adopción que varía según la región.
Pero los datos son sólo una parte de la historia.
Este artículo explora el potencial de la IA para la sostenibilidad -apoyándose en datos- y destaca aplicaciones concretas de la IA en la vida real, como el Proyecto Contrails de Google en la aviación y ALERTCalifornia en la gestión de catástrofes naturales.
El papel de la IA en la estrategia de sostenibilidad
La integración de la IA en las iniciativas de sostenibilidad es más que una palabra de moda: es una tendencia creciente con un impacto real. Las organizaciones están reconociendo el potencial de la tecnología para impulsar los objetivos empresariales y contribuir a las prácticas sostenibles.
Resultados de la encuesta sobre estrategia de sostenibilidad e IA
Una encuesta realizada en 2022 por McKinsey & Company destaca cómo las organizaciones están utilizando la IA en su estrategia de sostenibilidad. La encuesta muestra que muchas organizaciones están utilizando la IA para impulsar sus esfuerzos de sostenibilidad y también están trabajando para reducir el impacto medioambiental de sus operaciones de IA.
Según la encuesta, el 43% de los encuestados de organizaciones que utilizan IA afirmaron que la utilizan en su estrategia de sostenibilidad. Esta cifra varía según la región:
- Gran China (incluidas Hong Kong RAE y Taiwán China): 61% de las organizaciones
- Asia-Pacífico: 54%.
- Mercados en desarrollo (India, América Latina, Oriente Medio, Norte de áfrica y áfrica subsahariana): 44%
- Europa: 39
- Norteamérica: 30%.
Además, el 40% de los encuestados afirmaron que sus organizaciones están trabajando para reducir el impacto medioambiental de su uso de la IA minimizando la energía utilizada para entrenar y ejecutar modelos de IA. Esto también varía según la región:
- Mercados en desarrollo: 53% de las organizaciones
- Asia-Pacífico: 47
- Gran China: 46
- Europa: 36%.
- Norteamérica: 31%.
La encuesta también exploró los tipos de esfuerzos de sostenibilidad en los que interviene la IA:
- El 62% utiliza la IA para mejorar su impacto medioambiental, como la eficiencia energética y la reducción de residuos;
- El 51% utiliza la IA para evaluar los esfuerzos de sostenibilidad, como la evaluación comparativa;
- El 45% utiliza la IA para la gobernanza, incluido el cumplimiento y la gestión de riesgos;
- El 34% utiliza la IA para el impacto social, como el abastecimiento ético.
Mejores resultados en IA
Las organizaciones que invirtieron más en IA tenían 1,4 veces más probabilidades de realizar esfuerzos de sostenibilidad basados en IA. Estas empresas también se mostraron muy interesadas en reducir las emisiones relacionadas con la IA.
Curiosamente, las organizaciones de la Gran China, Asia-Pacífico y los mercados en desarrollo realizaban estos esfuerzos con más frecuencia.
Por otro lado, las de Norteamérica eran las menos propensas a hacerlo.
Al utilizar la IA, las organizaciones no sólo mejoran sus estrategias de sostenibilidad. También están estableciendo una norma para el uso responsable de la IA, contribuyendo a un futuro más sostenible y justo.
Proyecto Contrails de Google: Estrategia sostenible de IA para el impacto climático de la aviación
Partiendo de la creciente tendencia a integrar la IA en la estrategia de sostenibilidad, es fundamental explorar ejemplos concretos que demuestren el potencial transformador de esta tecnología.
Un ejemplo clave es el Proyecto Contrails de Google, cuyo objetivo es reducir el impacto climático de la aviación. Este proyecto constituye un caso de estudio convincente de cómo la IA puede emplearse estratégicamente para lograr avances significativos en sostenibilidad, sobre todo en sectores con una huella medioambiental considerable como la aviación.
Estelas de condensación e impacto climático
Las estelas de condensación son líneas de nubes que se forman detrás de los aviones a reacción cuando el vapor de agua y el hollín de los motores se congelan y se convierten en hielo. Estas líneas pueden convertirse en cirros, que tienen un gran impacto en el medio ambiente.
Para formar estelas de condensación, deben darse tres condiciones: vapor de agua, aire frío y partículas diminutas. Es más probable que aparezcan en aire frío y húmedo, normalmente a gran altitud.
Las estelas de condensación no son inofensivas. Atrapan calor en la atmósfera y contribuyen al cambio climático. Un estudio descubrió que los cirros de las estelas de condensación tienen el mayor efecto de calentamiento en la aviación, superando incluso el impacto de las emisiones de CO2 de los aviones (Lee, D.S. et al., 2021).
Visión general del Proyecto Contrails de Google
El Proyecto Contrails de Google pretende reducir el impacto climático de la aviación utilizando la IA para predecir la formación de estelas de condensación. Esto ayuda a las aerolíneas a evitar la creación de estas estelas de calentamiento, en consonancia con su estrategia de sostenibilidad.
El modelo de IA combina datos meteorológicos, de satélites y de vuelos para predecir cuándo y dónde es probable que se formen estelas de condensación. Los ingenieros han entrenado el modelo con decenas de miles de imágenes de satélite para detectar estelas de condensación.
De hecho, el modelo puede identificar estas estelas de condensación en imágenes de satélite en sólo 30 minutos.
Pruebas reales con American Airlines
En una prueba realizada con American Airlines, los pilotos utilizaron las predicciones de la IA para evitar las rutas en las que se formaban estelas de condensación. Los resultados mostraron una reducción del 54% de las estelas de condensación, con un aumento del consumo de combustible de sólo el 2%.
Dado que sólo habría que ajustar una peque?a fracción de los vuelos para evitar la mayor parte del calentamiento por estelas de condensación, el aumento de combustible en toda la flota de una aerolínea podría ser de tan sólo un +0,3%. Esto lo convierte en un elemento rentable de la estrategia de sostenibilidad de una aerolínea.
En última instancia, el combustible adicional quemado se ve compensado con creces por la reducción del calentamiento de las estelas de condensación, lo que supone un beneficio neto para el clima. El éxito del proyecto sugiere que la evitación de estelas de condensación podría convertirse en una norma en la aviación, destacando el papel de la IA en la mitigación del cambio climático.
ALERTCalifornia: Seguridad pública basada en IA
Como hemos visto, la IA se está convirtiendo cada vez más en una piedra angular de las estrategias de sostenibilidad en diversos sectores, desde las prácticas empresariales generales hasta campos especializados como la aviación. El Proyecto Contrails de Google muestra cómo la IA puede mitigar el impacto climático de la aviación. Otro ejemplo clave es ALERTCalifornia, que se centra en las catástrofes naturales, especialmente los incendios forestales.
Con sede en la Universidad de California en San Diego, ALERTCalifornia se propone comprender las catástrofes naturales y estudiar sus efectos a corto y largo plazo en las personas y el medio ambiente. El programa contribuye a mejorar la preparación y la respuesta ante las catástrofes.
Tecnología punta en estrategia de sostenibilidad
La iniciativa utiliza tecnología avanzada para estudiar los patrones cambiantes de las catástrofes. Desarrollada por ingenieros de la Universidad de California en San Diego, la plataforma utiliza IA de DigitalPath, una empresa californiana. Esta tecnología permite tomar decisiones basadas en datos para prepararse, responder y recuperarse de las catástrofes naturales, en consonancia con los objetivos más amplios de la estrategia de sostenibilidad.
ALERTCalifornia ha desplegado más de 1.000 cámaras de alta definición por todo el estado. Estas cámaras pueden girar 360 grados y tienen capacidad de visión nocturna casi infrarroja, lo que permite vigilar en tiempo real los incendios forestales y otras catástrofes. Las cámaras pueden realizar barridos de 360 grados aproximadamente cada dos minutos y tienen un alcance de visión de hasta 60 millas durante el día y 120 millas por la noche.
El control en tiempo real ha mejorado significativamente el conocimiento de la situación por parte de los primeros intervinientes, permitiendo una toma de decisiones más rápida y reduciendo así el tiempo que tardan en reaccionar los mandos en tierra de los bomberos de 20-30 minutos a tan sólo unos segundos.
Tony Mecham, Jefe de la Unidad del Condado de San Diego de CAL FIRE, dijo:
“Antes, los comandantes tardaban entre 20 y 30 minutos en llegar a los incendios y tomar decisiones, y ahora, con las cámaras, reaccionamos en cuestión de segundos desde el primer aviso… Eso marca la diferencia. No puedo expresar con palabras lo importantes que son esos primeros minutos”.
El éxito del programa tiene implicaciones más amplias para la seguridad pública y la gestión de catástrofes, y sirve de modelo para otros estados y países. También contribuye a la investigación sobre cómo prepararse y responder a los incendios forestales. Los datos recogidos están a disposición de empresas e investigadores, lo que podría dar lugar a nuevas aplicaciones de IA para el estudio del medio ambiente.
Al integrar la IA en sus operaciones, ALERTCalifornia no sólo mejora la respuesta a los incendios forestales, sino que también contribuye a una estrategia más completa de seguridad pública y gestión de catástrofes, que es un componente clave de una estrategia de sostenibilidad a largo plazo.
Conclusión
La IA no es sólo un avance tecnológico; es un catalizador del cambio en la estrategia de sostenibilidad. Tiene un valor incalculable a la hora de afrontar retos acuciantes, desde la aviación hasta la seguridad pública.
El Proyecto Contrails de Google y ALERTCalifornia son excelentes ejemplos. Muestran cómo puede utilizarse la IA para lograr avances significativos en sostenibilidad. No se trata de casos aislados, sino que forman parte de una tendencia más amplia, en la que la IA se está convirtiendo en un elemento central de las estrategias de sostenibilidad. Los datos de estas iniciativas también están abriendo nuevas vías de investigación, que podrían dar lugar a nuevas aplicaciones de la IA para el estudio del medio ambiente.
En resumen, la integración de la IA en la estrategia de sostenibilidad es una tendencia impactante. Establece la norma para el uso responsable de la IA, contribuyendo a un futuro más sostenible y justo para todos.